Yo estaba acostada en mi cuarto queriendo descansar. Había tenido un día muy duro y estresante en el trabajo. Pero, de pronto, en medio de la noche, me llega mi hijastra a la habitación. Yo pensé que era un sueño y le pedí que se acostara conmigo para cuidarla (ya que ella estaba asustada por unos ruidos que había escuchado). La comienzo a tocar para que se calme y, como yo pensé que estaba soñando, decidí chuparle el coño. Sí, me comí toda su flor y sus jugos porque pensé que era un sueño. Pero, cuando escuché sus gemidos de placer, entré en razón. Ella ya estaba completamente caliente y yo ahí demostré que verdaderamente, amo los coños de las mujeres. ¡Deseaba follarla hace un buen tiempo y mi subconsciente lo sabía! La volvería a cuidar todas las noches si ella lo desea.
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